Empezó tarde y de casualidad. Me saqué el título de sumiller en el año 2.010, con 34 años. Hasta ese momento no había trabajado en nada relacionado con el vino. Siempre ha sido algo que me ha llamado la atención y de lo que he querido aprender, pero fue la casualidad (o el destino) lo que me trajo a este mundo.
Durante el curso de sumiller empecé a relacionarme con bodegueros, asistir a catas, leer libros, visitar bodegas… Y en 6 meses estaba ya trabajando como sumiller en Makro. Actualmente, 6 años después, además del blog www.tecuentounvino.es, he escrito un libro, ¿Te cuento un vino? (elegido mejor libro de vinos de España en 2015 por los Gourmand Cookbook Awards) y dirijo una empresa de turismo enológico en la que realizamos uno de los viajes de Enoturismo de más éxito en la actualidad, El Cavino, que combina el Camino de Santiago con visitas a bodegas.
2.- ¿Están los blogs de vino en crisis?
Creo que no, que como en otros ámbitos comerciales, hay blogueros influyentes para los consumidores, que antes de tomar la decisión de compra consultan las opiniones de estos blogueros. A lo mejor, como cada vez que se produce un boom, hay muchos blogs, pero seguramente el tiempo hará selección y se quedarán aquellos que realmente tienen más capacidad de llegar al lector.
3.- ¿Qué podemos aprender en su blog?
Tanto en mi blog como en mi libro, trato de desmitificar la complejidad que se asocia al consumo de vino. Es muy frecuente oír a alguien decir que no bebe vino porque no entiende. Esto es un grave error, no hace falta entender de algo para que te guste. Y es un error que quizá hemos creado entre todos los profesionales, con un vocabulario técnico y complejo y una forma de catar nada fácil de asimilar. Catar es una profesión y hasta un arte, pero degustar… degustar es un placer. Y el vino, sin más, hay que degustarlo.
En mi blog se puede encontrar el vino visto desde otro punto de vista. Suelo decir que trato de contar el “lado humano” del vino. Sin complejidades, sin tecnicismos, simplemente la historia real que acompaña cada vino que bebemos; el por qué de un nombre, del diseño de una etiqueta, historias reales que han ocurrido en bodegas…
4.- Se puede ser amateur y hablar de vino.
Se puede y se debe. Hablamos de cerveza, de ginebras, de comida… ¿Y acaso somos maestros cerveceros o chefs de restaurantes con estrella? Como dije antes, el vino se degusta. Y por supuesto, se comenta.
5.- ¿Cuánto cuesta hacer un blog?
Creo que lo difícil no es solo arrancar, sino mantenerlo. Hay que sacar tiempo para tenerlo activo y actualizado, y eso no siempre es fácil. Yo mismo he tenido épocas en los que me ha sido imposible hacer nuevas entradas, pero al final, la constancia es la que te va a dar seguidores y lectores, así que hay que hacer este esfuerzo.
6.- Su vino/s favoritos
Esa siempre es la pregunta más difícil. Tengo especial cariño por los que salen en mi libro, pero no podría nombrar solo uno. Siempre me ha gustado muchísimo lo que se hace en Bodegas Artadi, también muchas cosas de Jumilla y, últimamente, estoy descubriendo vinos espectaculares en Toro.
7.- ¿Una variedad de uva y una denominación de origen?
Me mojo con una uva blanca, Godello, y una D.O. clásica de tintos, Toro.
8.- Como consumidor: ¿Tienda online o Vinoteca?
Vinoteca, siempre.
9.- Una recomendación.
Si te gusta el vino, haz visitas directas a bodegas. Vas a emprender mucho y te atrapará este mundo.
10.-Un consejo para los que están iniciándose en el mundo del vino.
Simplemente que lo disfruten, solos o acompañados, sin más complicaciones que deleitarse con uno de los más grandes placeres para los sentidos que tenemos la suerte de poder percibir.
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